Su marido está todo día pegado al puto teléfono, la pobre mujer ya casi no sabe que hacer para que le eche un polvo. Tiene métodos de persuasión para hacer que su marido dejépor un rato el teléfono y le haga caso, concretamente tiene dos, dos pedazo de tetas que es sacarlas y conseguir su propósito, a este paso la mujer se va a pasar el día con las tetas al aire para que su marido le haga más caso.