Algunas clientas de mi taxi son muy zorras la verdad

Y una de las últimas fue Eva Berger, joder, no llevaba montada ni cinco minutos cuando ya me estaba enseñando las tetas y pidiéndome que parara el coche un rato para tener sexo, la verdad es que como el día iba bien no creo que por parar medio hora el jefe me fuera a decir nada, así que paré el coche y tuvimos sexo duro en el taxi.